

Episode 4
Episode 4 | 1h 3m 2sVideo has Closed Captions
Yanes and Helder are on the trail of Yanes' motorcycle assailant.
The second body is identified. Amalia reveals a secret that Paula denies. Yanes and Helder are on the trail of Yanes' motorcycle assailant.

Episode 4
Episode 4 | 1h 3m 2sVideo has Closed Captions
The second body is identified. Amalia reveals a secret that Paula denies. Yanes and Helder are on the trail of Yanes' motorcycle assailant.
How to Watch The Drought
The Drought is available to stream on pbs.org and the free PBS App, available on iPhone, Apple TV, Android TV, Android smartphones, Amazon Fire TV, Amazon Fire Tablet, Roku, Samsung Smart TV, and Vizio.
Providing Support for PBS.org
Learn Moreabout PBS online sponsorship-Fuentes cercanas al caso no descartan que los cuerpos puedan pertenecer a posibles víctimas de los enfrentamientos ocurridos hace más de 20 años.
-Tengo entendido que a usted le costó bastante sacar adelante la ampliación de la presa.
En realidad he venido por los cuerpos que han aparecido en su embalse.
-Pero ¿de dónde cojones sale este artículo?
-Ese periodista que no vuelva a escribir sobre nosotros ni sobre nada.
[hablando portugués] -Pero esta vez tengo que ir a España.
Es más complicado.
-Me dices qué cojones haces aquí o llamo directamente a tu jefe en Portugal.
-Empezó como una manera de darle las gracias, pero se ha convertido en una esclavitud.
-Y con el ADN te liberas.
-Mi matrimonio es asunto mío, no te consiento que te quites.
-Tengo que aguantarlo todos los días bajo mi techo.
-Me está dejando de lado en las decisiones de la empresa.
Nuestro futuro depende de eso.
-Pero cariño, no se puede estar al frente de un consorcio como el Grupo Barbosa cuando tu marido se pasee con una mujer que no eres tú.
-¿No quieres que te acerque?
-No, tranquilo, no hace falta.
Gracias.
-¿Has quedado con alguien?
-No.
No, iré directo para casa.
-Mi nombre es Jaime Pizarro.
Sé quién es y a qué se dedica.
También conozco que tu negocio está pasando por una situación delicada.
-Había unos ecologistas portugueses.
Aquí, míralos.
-¡Más rápido, coño!
[disparo] -¿Y los cuerpos de Campomediano?
¿Qué tienen que ver con Luis Barbosa?
-¿Qué relación tienes tú con Luis Barbosa?
-¿Qué?
-Antonio Hurtado.
Leal y estúpido.
-Un pájaro que acabó siendo comisario.
-O sea que en esa época, después de leerme un cuento, te ibas a dar palizas por dinero para Luis Barbosa.
-Fue un accidente lamentable.
-Publícalo.
-¿Dónde están las llaves?
Las llaves del coche.
[♪ música de tensión] [disparos] -¡Sube que le dan dado!
¡Vamos!
¡Arranca!
[♪ música de suspenso] [tono de teléfono] -Estaba esperando su llamada, doctor.
[♪ música emotiva] [sollozos] [tono de teléfono] - ¿Ocurre algo?
-Tengo a dos auditores de la Junta esperando abajo.
-Nos tenían que haber avisado con tiempo.
-Dicen que tienen autorización.
-Lo deja en tus manos.
Haz lo que sea, pero páralos.
¿Me entiendes?
Los paras.
-De acuerdo.
-¿Todo bien?
-Podemos tener problemas.
Lucia, ve a buscarles, por favor.
Hazles pasar.
-Es una mujer fuerte, sabrá superarlo.
-Es esperable que tenga momentos de rabia y también de negación.
Puede que incluso se eche la culpa por la muerte del hijo.
-Eso suena muy bien a una clase en la universidad.
No siempre tiene por qué ser así.
-Estoy hablando como madre.
Me pongo en su lugar.
-Amalia no tiene culpa de nada.
Joaquín siempre fue un chico difícil.
Sus padres tenían que haberlo atado en corto.
-¿Dices que Joaquín se merecía lo que le pasó?
-Por respeto a su madre, nunca lo dije.
Pero siempre pensé que acabaría metido en un buen lío si es que no terminaba en la cárcel.
-Joaquín era una víctima.
A lo mejor ahora estaría vivo si tú u otros como tú le hubieseis ayudado solo un poquito.
-¡Uh!
¡Joaquín, Paula!
[balbuceos] -Vale, me toca, me toca, me toca.
Yo no sé cómo será el paraíso, pero joder.
¡Joaquín, vamos, anda!
¡Venga, anda!
¡Vamos, Joaquín!
[hablando portugués] -Sé que no es consuelo, pero ya no tienes que seguir buscando.
[hablando portugués] Yo... [hablando portugués] [hablando portugués] -No te preocupes, lo entendemos.
[hablando portugués] [hablando portugués] -Da un beso de mi parte a Rubén.
-Se lo daré.
Vendrá a verte, hoy no era el día.
-Me haría mucha ilusión.
Tienes un hijo maravilloso.
Cuídale.
Un hijo es lo más importante, Paula.
No lo olvides nunca.
[♪ música de suspenso] [hablando portugués] -Esto es como no enseñarnos nada.
-Ahí están las actas de cada consejo en la administración.
-Queremos hechos, no lo que se habla en una sala privada.
Ustedes tenían que cometer una serie de infraestructuras y eso es lo que queremos saber, qué están haciendo.
-Preocuparnos por el medio ambiente.
Eso es lo que estamos haciendo.
- Perdón, ¿y usted es?
-Es el nieto de don Luis Barbosa.
-Su abuelo le habrá explicado que tienen unos compromisos que cumplir.
-Sí, y también me ha explicado que esas obras suponen una alteración del paisaje.
Por eso se están retrasando un poco.
-¿Qué entienden por "un poco"?
-Hasta que no tengamos el estudio sobre el impacto medioambiental, no podemos empezar esas obras.
-Muy bien, pero tendrán una copia del proyecto.
-Esa documentación está en fase de estudio.
No estoy autorizado a mostrársela.
-Claro que lo está.
Entiendo que usted es el asesor legal de la empresa.
-Hasta que el ministerio no se pronuncie, es información reservada.
Hablo con el ministerio, si quiere.
Que decidan ellos.
Yo no tengo ningún problema.
-Llamaremos.
Claro que sí.
Pero serán nuestros servicios jurídicos.
-Por supuesto.
[hablando portugués] [hablando portugués] [continúan hablando portugués] -Sí, entendí.
[campanadas] [♪ música de suspenso] -Ya tendría que estar en el trabajo.
-Lo siento.
-Que vives a 15 minutos, joder.
-Creo que me están siguiendo.
-¿Y te estarás montando en una película?
-Pues si es así, vamos a tener que dejar de vernos.
-De ti nadie sabe nada.
Y hasta aquí no me ha seguido nadie.
A lo mejor llevas razón y son paranoias mías.
-Ven.
Esto te va a gustar.
Se han presentado dos auditores de la junta en las oficinas de Barbosa.
Se fueron con las manos vacías, claro.
-¿Y para qué fueron, si puede saberse?
-La concesión de la hidroeléctrica, ahora expira el plazo y la junta tiene que tomar una decisión.
-Pues ya sabemos lo que va a pasar.
-Nah.
No las tienen todas consigo, está el tema de la central de bombeo.
-¿Por qué?
-Porque no han hecho nada, las obras están paradas y tenían que haber terminado por lo menos la primera fase.
-Dime la verdad, ¿tú qué tienes en contra de los Barbosa?
-¿Qué pasa?
¿Que no puede haber funcionarios honrados o qué?
[♪ música de suspenso] [hablando portugués] [♪ música de suspenso] -Pensaba que vivía en una buena casa, no en un palacio.
[ríe] -La familia Sousa Cardosos es de las más importantes de Portugal.
-Pensaba que era un encuentro discreto, Alvaro.
-La inspectora Llanes, de la Policía Española.
-Señora Souza, antes de nada me gustaría transmitirle mis condolencias.
-También quiero transmitirle algo.
¿Cuándo piensa la justicia española traerme a mi hijo?
-La inspectora Llanes fue quien consiguió el ADN de Joaquín.
-Perdón, eso significa que estoy en duda con usted.
Discutimos y salió dando un portazo.
No era la primera vez, pero fueron varios días sin saber de él.
Fui a la policía.
Allí nos conocimos.
-Yo acababa de entrar en la policía judicial.
-¿Y por dónde empezasteis?
-Pues por la hipótesis de secuestro.
-Sí.
-Y luego llegó la carta.
-La carta venía de Brasil.
Me contaba que quería cambiar de aires, empezar de cero.
Y yo me alegré.
Mi hijo tuvo una vida demasiado fácil y aprender a valerse por sí mismo le vendría bien.
-¿Mantuvieron correspondencia?
-Fue una única carta.
Me decía que iba a recorrer el país con una mochila.
Me pedía libertad.
-¿Le importa que nos la quedemos mientras dura la investigación?
-Sí, claro.
Creo que le servirá de ayuda, ¿no?
-¿Quién es esta chica?
-Es Paula Barbosa.
Sus padres son buenos amigos.
Han estado aquí, dándome él pésame.
Ellos sabrán ser discretos.
-Veo que Paula Barbosa tenía buena relación con su hijo.
-Fue novia de Joaquín.
[♪ música de suspenso] -Yo empezaría por Paula Barbosa.
Me llama la atención que fuese la novia de Joaquín.
-No veo nada raro.
Dios los cría, ellos se juntan.
Sí.
Cambiando de tema, ¿vamos a comer?
-Te dejo elegir, que eres el que sabe.
-Te voy a llevar al mejor restaurante de Lisboa.
-Somos policías, no banqueros.
-Me refería a mi casa.
-Hombre, presentarme así, sin avisar, no sé.
-No, Clara sabe que estás aquí.
Ha sido idea de ella, no mía.
-No quiero molestar, de verdad, déjalo.
-No molestas nada.
Y así también conoces a mis hijas.
Anda.
-Volvemos a la actualidad nacional.
Hoy tiene previsto reunirse una delegación del Ministerio de Medio Ambiente para afrontar las consecuencias provocadas por la sequía.
Las reservas de agua embalsada están en el nivel más bajo de esta década.
[♪ música de suspenso] -Esta es la central hidroeléctrica de Campomediano.
El Grupo Barbosa dice que acometerá las obras en tres plazos.
El primero de los plazos debería ya estar terminado.
Aquí, por lo que se ve, no hay ninguna prisa en comenzar las obras.
Veremos si el Grupo Barbosa da algún tipo de explicación.
-¡Hola!
[hablando portugués] Clara, mi mujer.
-Daniela.
[hablando portugués] Gracias por invitarme.
-Soy María.
-Pensaba que me iba a encontrar con una niña de ocho años.
[hablando portugués] Beatriz, ¿no?
-Sí.
Hola.
-Hola.
[hablando portugués] -Cuando son pequeñas, presumen de un padre policía.
Luego, de mayor, la cosa cambia.
[hablando portugués] -No me lo he planteado, la verdad.
Pero no es fácil compaginar este trabajo con la vida familiar.
[hablando portugués] -A lo mejor he dicho algo que no debía.
-No, no es de esa importancia.
Clara tiene razón.
A ella le gustaría que tuviera un puesto con menos responsabilidad.
Trabajo de oficina o algo así.
-Puedes pedir que te cambien de destino cuando terminemos esto.
-Pero yo no sirvo para estar en un despacho, Daniela.
No.
¿Llevar una vida normal?
¿Sabes?
¿Sabes lo que sentí cuando tuve la pistola aquí?
Que yo me lo había buscado.
Que tarde o temprano tenía que pasar.
Es mi forma de vivir.
Y creo que no sé vivir de otra manera.
Pero tengo una familia.
Y sé que sufren sabiendo que me puede pasar algo.
-No tenemos que pedir perdón, Hélder.
Somos policías.
-Ya.
Nos vemos mañana.
-Hasta mañana.
-Buen viaje.
[hablando portugués] [♪ música tensa] [hablando portugués] -Entiendo tu enfado.
-Pero no haces nada para evitarlo.
-Esa inspección ha partido de presidencia.
Yo no tengo mano ahí.
Me he enterado después.
-Hoy les hemos podido parar los pies, pero volverán a tocarnos los huevos.
Carmen, explícame qué coño está pasando.
-Hay gente interesada en que no renueven la concesión.
Están presionando a algunos miembros de la Junta.
-¿Y esos algunos quiénes son?
-No lo sé, Luis.
No lo sé.
-Nombres, Carmen.
Quiero nombres.
Averigua con quiénes están negociando.
Para algo estás en la Junta.
-Imagino que esas negociaciones no se hacen a la luz del día.
-Sé perfectamente cómo son.
Buenos hoteles, mejores restaurantes.
Pero tú conoces a mucha gente.
Seguro que saben ver y escuchar.
Y te pido otro favor.
-Lo que tú me digas.
-Que nos deis más tiempo antes de decidir sobre la concesión.
-Haré lo que pueda.
Yo también quiero pedirte un favor.
Seamos discretos.
Es mejor que no nos vean juntos.
Ni aquí, ni en ningún sitio.
-De acuerdo.
Pero no lo olvides.
Está en juego el porvenir de todos.
[♪ música de suspenso] [♪ música tensa] -Buenos días.
Buenos días.
-¿Qué tal el viaje?
-Muy bien, muy bien.
Oyendo música todo el camino, así que... ¿Y por aquí?
-Antonio muerto, en su casa.
No le dio tiempo ni a terminarse el cigarrillo que se estaba fumando.
Había bebido y tomado pastillas, bastantes, al parecer.
Le provocó una reacción, tuvo arcadas y se ahogó en su propio vómito.
-Bueno, se bebió mucho, tiene su lógica.
¿Qué piensas tú?
-Yo no sé qué pensar.
Pero ¿por qué alguien querría matar a Antonio?
Es que por más vueltas que le doy, no encuentro el motivo.
-¿Esta la encontraron en su casa?
-Sí, es la misma que se usó en Campomediano para el disparo en la cabeza.
-Quizá alguien quiere hacer justicia, ¿no?
-¿Y mata a Antonio 20 años después por venganza?
Un plato demasiado frío, ¿no?
-Bien.
¿Hablaste con quién?
Con la prima suya, ¿no?
-Sí, me dijo que era alcohólico, pero que no había tenido ningún problema con nadie.
Aunque está lo otro.
-¿Qué otro?
-Ortiz.
¿Por qué iría a casa de Antonio justo después de que yo le acusara de estar detrás de los ataques a los manifestantes?
-Ya.
Está estable.
Nos han dado esperanzas.
-Hasta luego.
-No te lo he dicho.
Gracias.
-¿Por?
No entiendo.
-He visto que el ADN de Joaquín está en el fichero de Interpol, solo has podido ser tú.
-Entre compañeros debemos ayudarnos.
-¿Inspectora?
-Puede comprometernos.
-Oficialmente, Joaquín sigue siendo un cadáver sin identificar.
Y nos ayudará que las demás policías compartan esa información.
-Señor Barbosa.
-¿Sí?
-Ha llegado su visita.
-Que pase.
-No sé si se acordará de mí.
Soy Jaime Pizarro.
-Sé que ha intentado varias veces concertar una cita conmigo.
¿En qué puede ayudarle?
-Soy yo quien viene a ayudarle a usted.
-Tome de asiento, por favor.
-Yo también me dedico a los negocios.
Y por experiencia sé que todos solemos caer en el mismo error.
La dispersión.
-Yo solo me dedico al sector energético.
-Y también a los caballos.
-Digamos que son un hobby.
-Tenemos amigos comunes.
Y me han asegurado que el Club Hípico es una máquina de perder dinero.
-Veo que esos amigos comunes me han informado bien.
-Mi trabajo consiste en reflotar empresas en números rojos.
Y verá, estoy dispuesto a asumir la deuda que usted tenga a cambio de la explotación del negocio.
Es mi yerno quien tiene esa deuda conmigo.
Es el gerente de la Hípica.
-También estoy informado.
Y no se preocupe.
Sabré cómo entenderme con él.
-Veo que no viene a resolverme un problema, sino dos.
-¿Habría alguna manera de poder identificarlos?
-Por las dentaduras.
-Pero también estarán deterioradas.
-Afortunadamente están lo suficientemente bien como para hacernos una idea de quiénes fueron.
La edad, la alimentación, las patologías, la clase social, hasta la personalidad.
Todo eso nos dicen los dientes de nosotros.
Este, por ejemplo, tuvo una alimentación impecable.
Se nota que se crio entre algodones.
Y a este le importaba mucho su imagen.
Se dejó un buen dinero en tener esta bonita sonrisa.
-A lo mejor le preocupaba tener una boca sana.
No, a este la salud le importaba más bien poco.
-¿A qué se refiere?
-He encontrado una necrosis local en el tabique nasal.
Por isquemia.
No, que le gustaba la fiesta.
Demasiado, diría yo.
A los dos.
-¿Podría hacer una radiografía dentada a cada uno?
-Ya les he hecho una ortopantomografía.
Una radiografía extraoral.
No podía manipular las mandíbulas.
Las he subido al fichero de los cadáveres sin identificar, como marca el protocolo.
-No era nuestra intención cuestionar tu trabajo.
-Oiga, ¿usted y yo nos hemos visto antes?
-Lo dudo.
-Tiene razón, sí, perdone.
Creo que le he confundido con una persona que llevaba gorra.
No le vi bien la cara.
-Buen trabajo.
Gracias.
¿Crees que podremos identificarlos?
-El del tabique era consumidor habitual y alguien que se mueve en ese mundo tiene todos los boletos para terminar en la cárcel.
Así que en alguna cárcel habrá una... orto... -Ortopantomografía.
-Eso.
-Vámonos.
-Duarte me informó que estuviste muy bien con los dos idiotas esos.
-Algo tenía que servir la escuela de negocios, ¿no?
-Claro que sí.
Ha sido una buena inversión mandarte ahí.
Aunque hay cosas que nunca te enseñarán en la universidad.
Mira, se llama Verónica.
Pero ese es lo de menos.
Lo importante son sus apellidos.
Urquijo Ayala.
Cuánto tiempo que no te veo, Verónica.
¿Qué tal tus abuelos?
- Los dos bien.
Se han ido a pasar el verano a la finca.
-Me alegro.
Salúdales de mi parte cuando los veas.
-Claro.
-Te presento a mi nieto, Rubén.
Hola.
-Acaba de llegar de Portugal por las vacaciones y resulta que ahora sus amigos se van fuera.
-Portugal.
Yo voy a pasar unos días en Comporta.
-Perdón, es importante.
-Qué guay que todo esto sea de tu familia.
-Sí, sí.
No está nada mal.
-Mis amigos están aquí y queríamos salir esta noche.
-Podrías venirte.
-Claro, claro.
-Vale.
Adiós.
-No me pareció que te sonase el móvil.
-¿Qué tal te ha caído la nieta de mis amigos?
A lo mejor las personas que conoces hoy te abrirán puertas en el futuro.
Recuerda el consejo de tu abuelo, buena disposición siempre.
-¿Qué te decía tu abuelo?
-Nada.
Nada, nos estábamos despidiendo.
-Lleváis un buen rato hablando, ¿no?
-Cosas del abuelo.
Ya sabes cómo es.
-Ya.
[♪ música de tensión] -Hace tanto tiempo que casi ni me reconozco.
-Yo la veo igual.
-Gracias.
Pero ya me gustaría estar como con 18, que debe ser cuando nos hicimos la foto.
-¿Y eran novios, Joaquín y usted?
-¿Hay algo en las fotos que le haga suponer eso?
-Nos lo dijo la madre de Joaquín.
-Una madre solo oye lo que quiere oír.
-¿Por qué iba a mentir la señora Sousa Cardoso?
-Joaquín le hizo creer eso.
Joaquín le iba en los chicos, por entonces no estaba muy bien visto, y más entre los de nuestra clase.
-Parece que Joaquín se llevaba bastante bien con el otro.
¿Podría haber algo más que amistad?
-Si le digo la verdad, este chico no me acuerdo.
-Sin embargo, aquí parece que se llevan muy bien.
-Ya le digo, no me suena.
-A ver, ahora con los móviles la gente no para de hacerse fotos, pero antes no te hacías una foto con el primero que pasaba.
-No entiendo su tono.
-Todos queremos saber qué pasó con Joaquín.
-Joaquín empezó a consumir y este era el que se la compraba.
-¿Su camello?
-Sí, le prefería decir su dealer.
-¿Y recuerda su nombre?
-Hace mucho que yo sé a lo que se dedicaba, pero no recuerdo su nombre.
Creo que por entonces Joaquín y yo empezamos a perder contacto.
-¿Dejaron de verse?
-Cambió de amistades y a mí no me gustaban demasiado.
-¿Tiene alguna idea de quién puede ser la persona que apareció junto a Joaquín?
-Si lo supiera, se lo diría.
Joaquín era como... como un hermano para mí.
Volver a recordar todo esto, saber como... como lo mataron y... como lo enterraron me... me remueve por dentro.
-Claro.
Muchas gracias por su colaboración.
[hablando portugués] -¿Y a ti?
¿Qué te gustan más, los tíos o las tías?
-¿Y tú qué crees?
¿Vas a probar?
-¿Y tú?
-Claro que sí, vamos, chica.
Va, para adentro.
¡Eso, eso!
[risa] ¿Estás borracha ya?
-Ajá.
-Ay, qué bueno.
[hablando portugués] [♪ música emotiva] -Para ser la orgullosa que me habías pintado, me pareció bastante afectada.
-Querría impresionarte.
-¿Por qué a mí?
-Ha visto que eras el flanco débil y te ha montado la escenita.
-¿Qué es eso del flanco débil?
-Te tenía hipnotizado, Hélder.
-En cualquier caso, nos ha dado dos datos importantes.
Que era gay y consumía.
-Tres datos.
Tenía su propio dealer.
-Bueno, sobre eso sabe más de lo que nos ha contado.
Joaquín estaba más enganchado de lo que pensábamos.
-No me extrañaría que estuviera por ahí metido en algún buen lío.
-¿Tanto como para pensar en un ajuste de cuentas?
-Pues claro, ese mundo es asqueroso.
Basta con pasarte un poco de listo para terminar con un tiro en la cabeza.
-Y el otro cadáver, ¿podría ser el de la fotografía?
-Tenemos la radiografía dental.
Es la única pista.
Oye.
¿Esto llamáis vosotros café?
Qué rico.
[♪ música electrónica] -Ahora vengo.
Pensaba no vas a venir.
-Me lo he pensado mejor.
-¡Me alegro mucho!
Ven, que te presento a mis amigos.
Ven.
Perdón.
¡Ey, chicos!
Este es mi amigo Rubén.
-Hola.
-Oye, ¿quieres beber algo?
-Sí.
Sí, lo que quieras.
-Bueno.
[♪ música electrónica] -¿Te aburres?
-No, para nada.
-Pues tienes una cara de aburrido.
-¿Qué va?
Si la fiesta está muy bien.
-Ya.
[risas] -He tenido un par de conversaciones muy interesantes sobre botas de esquí.
No es mi punto fuerte.
-Oye, después nos vamos a ir a casa de Alicia.
Pero solo unos pocos, ¿eh?
Verás cómo te lo pasa muy bien.
-¡Vero!
¡Vero, vení!
-Venga, una canción.
-No, no.
Ve tú, te espero aquí.
-Ven.
-De verdad, te espero, te espero.
-Dos minutos.
[risa] [♪ música electrónica] [♪ música de suspenso] -Lo mejor que puede hacer es cogerle de la mano y hablarle.
Se pondrá bien.
Es fuerte.
-Javier.
Todo apunta a que... Yo puedo intentar entender lo que hiciste.
No lo apruebo, pero... podría entenderlo.
Pero si has matado a alguien, me romperías en dos.
No has podido ser capaz de hacer algo así.
Sólo tú me puedes ayudar a demostrar tu inocencia, Javier.
¿Qué es lo que sabes?
Por favor, tienes que salir de esta.
Tenemos muchas cosas de las que hablar.
[♪ música emotiva] [golpes a la puerta] -Perdona por llamarte así tan de repente.
-Bueno, por algo tienes mi teléfono, ¿no?
-Toma por la hora, hoy es muy tarde.
Y gracias por venir, Andrea.
Tenía que verte.
Algo va mal.
¿Qué pasa?
Mal de amores.
¿Es eso?
No, no es tan fácil como eso.
-A ver, ser un chico complicado es lo que te hace tan interesante.
Ya, pues yo creo que no todos piensan lo mismo.
-Pero ¿y a ti qué más te da lo que piensen los demás?
Si es que lo tienes todo.
No los necesitas.
-Pero ellos a mí sí.
Demasiado.
Mi abuelo se cree que soy él cuando tenía 20 años.
Y solo quiere que haga exactamente lo que él hubiera hecho.
Y después están mis padres.
Que solo quieren que me aleje de él, pero no por mí.
Por ellos.
-¿Y qué tal en el trabajo con tu abuelo?
-Bien, supongo.
Ayer vinieron a hacernos una inspección.
Tuve que inventarme un rollo de que estábamos esperando el estudio y el impacto medioambiental.
Supongo que lo de mentir me viene de familia.
[♪ música de suspenso] -¿Cómo sabes que estoy saliendo?
¿Dónde?
¿Dónde estás?
Mira, se acabó.
Es que no quiero seguir con esto.
No quiero que a Rubén le ocurra nada.
Ya, ya, ya sé que me has pagado, pero... Vale, de acuerdo, pero en el momento en el que tengas toda la información, se acabó.
Me ha dicho que han tenido una inspección.
[hablando portugués] -Estamos perdiendo el tiempo.
Nadie lo conoce, o dice no conocerlo.
-Me parece que nos somo bien recibidos aquí.
Hostia, la rueda.
¿Y vosotros qué?
¿De qué os reís?
[hablando portugués] -Cambiamos la rueda y te invito a un café.
Pero un café de verdad.
-Luis Barbosa nos espera.
Se nos va a hacer tarde, joder.
[motocicleta acelerando] ¿Qué ocurre?
Una moto trucada.
En Cádiz era el pan nuestro de cada día.
-¿Luis Barbosa está al corriente?
-Evidentemente.
-¿Y qué interés tiene mi suegro?
-Martín, todo va a seguir igual.
Lo único que las decisiones ahora las tomaremos juntos.
-¿Y qué pasa si me niego?
-Esto funciona como los bancos.
Tú tienes una deuda y si te cambias de entidad, esa deuda te sigue persiguiendo.
Y ahora tu nuevo banco soy yo.
-¿Qué ganas tú?
-La pregunta es otra, Martín.
¿Qué ganaremos los dos?
-Buenas tardes.
Un auténtico hombre hecho a sí mismo.
Casado con una rica heredera.
Quitándole la empresa al suegro.
-Veo que vienes con los deberes hechos.
Sí.
¿Quieres hacer de poli bueno?
-A ti se te da mejor, eres más convincente.
-Ah, ya.
El flanco débil.
-Acompáñame, por favor.
-Creí que era la policía española que se ocupaba del caso.
-Joaquín era portugués.
Y hay otros intereses.
-Claro.
Que se trate del hijo de Amalia Cardoso supongo que algo habrá influido.
-Joaquín era su ahijado.
-Mm.
-¿Eso hizo que tuvieran una relación más especial?
-Inspectora, cuando yo era pequeño, un padrino era como un segundo padre.
Con Joaquín, sin embargo, me limité a pagar la comunión y a hacerle buenos regalos de cumpleaños.
-Hablamos de una relación más formal que familiar.
-Sí.
Puede decirlo así.
Pero ahora me arrepiento.
Debí estar más pendiente del chico y escuchar a sus padres.
-¿Alguna vez le pidieron ayuda?
-Nunca.
Pero aún que parecía un chico tímido y algo retraído, se veía que era un poco trasto.
-¿Sabía usted que Joaquín después tuvo algunos problemas con las drogas?
-¿Cómo?
La última vez que lo vi, tendría 16, 17 años.
Era un crío todavía.
-¿Su madre nunca le dijo nada?
-No.
Comprendo a Amalia.
Para ella, las apariencias importan demasiado.
Los trapos sucios se limpian en casa.
El padre de Joaquín murió cuando él tenía 12 años.
Era el único que podría hacerle entrar en razón.
A esa edad, la muerte de un padre marca.
-¿Y no le parece raro que apareciese enterrado en Campomediano?
-Esa es una pregunta que debe responder la policía, ¿no le parece?
-¿Es un terreno de su propiedad?
-En absoluto.
Me limité a construir un embalse y a llenarlo de agua.
Son más de 10 000 hectáreas.
Si mañana aparece un tesoro enterrado, no me quedo con él.
-Que si podía haber hecho algo más, que si la muerte del padre, que como me arrepiento.
Si la víctima parecía él.
-La verdad, la gente que podía ayudar a Joaquín no lo hizo.
-A veces te fallan los que más cerca tienes.
Oye, tu hotel no es por aquí, ¿no?
-No, pero vamos a ir a tomar un gin tonic.
-Estoy cansada.
-Por eso mismo.
Ha sido un día muy largo.
Hemos ganado esa copa, anda.
-Mejor otro día.
-Cómo quieras.
[hablando portugués] [♪ música de suspenso] -Por favor, ¿nos puedes dejar?
¿Has podido dormir?
Un poco.
-Yo no puedo.
-Tranquila.
¿Vale?
-Bonita mañana.
-Buenos días, Mónica.
Voy a cambiarme.
-Vale.
-¿Todo bien?
-Todo bien.
[hablando portugués] -Ahora sí.
Disculpa, perdona.
-¿Todo bien en casa?
-Las niñas.
Aprovechan que no estoy para revolucionarse.
-Volverá a llover alguna vez o qué?
-Espero.
Hay zonas de Portugal donde hay restricciones.
-Y aquí también, ¿tú qué te crees?
La sequía nos afecta a todos.
-Bueno, pero vosotros tenéis los embalses.
Si cerráis el grifo, nosotros nos quedamos sin agua.
-Sí.
-Sí.
-Eso díselo a Luis Barbosa.
-Vale.
¿Orden del día?
-Primero de todo, vamos a ir a comisaría.
Es posible que haya llegado... [motocicleta acelerando] Hélder, ¿me estás escuchando?
Te estoy diciendo que primero vamos a ir a comisaría.
Yo no te entiendo.
-Cuando tienes una pistola en la cabeza, el mundo se detiene.
Sabes que vas a morir.
Tus cinco sentidos se ponen a mil por hora.
Todavía tengo el sonido de aquella moto aquí.
Porque no era como las demás, era una moto trucada.
El que quiso matarme tenía una moto trucada.
¿Dónde trucan motos en esta ciudad?
-Hace mucho que me fui, pero imagino que hay cosas que no cambian.
[♪ música de suspenso] Llevamos varios talleres y nada.
¿Estás segura de lo que viste?
-¿Hola?
-¿Hay alguien?
-¿Hola?
Demasiado carburador para esta moto, ¿no te parece?
¿Hola?
Era una igual que esta.
Igual.
[♪ música de suspenso] [traqueteo de puerta] [♪ música de suspenso] Y se fue.
Pues vámonos, que ya no pintamos nada aquí.
-Hay que avisar a la científica para que recoja todas las pruebas.
-Por lo menos esta vez no nos lo han pinchado.
-Tendríamos que haber pedido apoyo.
-Ya, lo siento, era una acorazonada mía.
Quizá podamos averiguar quién es el dueño del taller.
-¿Crees que aparecerá en el registro de la propiedad?
[tono de teléfono] -Puede ser.
Portugal.
[hablando portugués] La radiografía del segundo cuerpo corresponde a un tal Joao Portela.
-¿Y cómo han dado con ella?
-Portela estuvo en la prisión de Caxias, se peleó con un preso, tuvo que pasar por el dentista y allí le hicieron una radiografía.
Y la compararon con la del forense.
¿Te suena?
-Deja un mensaje después.
-Hijo de puta.
Escúchame, cabrón.
Ha venido la poli.
Me dijiste que no me preocupara.
Te aviso, ¿eh?
Este marrón no me lo como yo.
[pitidos electrónicos] [♪ música de suspenso] [jadeos] [pitidos electrónicos se intensifican] [pitido sostenido] [alarma de computador] [♪ música de suspenso] -Voy a pedirte una cosa.
Llama a la prensa y di que Ortiz siempre actuó conforme a la legalidad.
-¿Qué es lo que sabes que no me quieres contar?
Si Ortiz está muerto quizás tenga algo que ver con lo que estás investigando.
-Olvídalo, no lo pienso permitir.
-Martín, tienes una deuda y para saldarla tienes que hacerme este pequeño favor.
[disparos] -¡Su puta madre!
-¿Cuánto dinero tienes aquí?
-Ya tuve una movida con el tuerto, ¿es loco?
Dame eso.
-Se llamaba Joan Portela, ¿lo reconoce?
-No en mi vida.
-Dentro de poco tendrá lugar la junta de accionistas, habrá que tomar posiciones.
-Creía que a pesar de las diferencias tu padre y tú estabais en el mismo bando.
-Luis Barbosa nos mintió.
-¿A qué te refieres?.
-A Portela.
-Esta foto se tomó un poco antes de lo de Campomediano y de estos tres, dos aparecieron allí enterrados.
-¡Todo el mundo al suelo!
-¡Al suelo!
-¡Al suelo!
-¿No nos oye?
¡Al suelo!
-¡Vosotros apartaos del mostrador!
-La otra persona tiene que saber por qué.